El concepto de “sustentabilidad” está en boca de todos desde hace varios años. Escuchamos sobre industrias y empresas sustentables, sobre alimentación sustentable, entre otros. Pero qué significa? Qué implica?
La primera vez que se habló de “Desarrollo sustentable” fue en el año 1987 en el informe Bruntland. Un informe realizado por un equipo de las Naciones Unidas, liderado por la ex-primera ministra noruega Gro Harlem Brundtland, donde se analizaba y revisaba la relación entre el desarrollo económico de las naciones y el alto daño ambiental que este causaba.
El “desarrollo sustentable” está definido como aquel que satisface las necesidades del presente sin comprometer las necesidades de las futuras generaciones. Sin dudas, un concepto revolucionario, que implica pensar en cómo nuestras acciones pueden repercutir en la vida de personas que tal vez ni siquiera han nacido. Además del hecho de que se pensaba que el desarrollo económico podía ser amigable con el ambiente, cuando durante muchos años estuvieron en veredas opuestas.
Este tipo de desarrollo no está en contra de las industrias ni el desarrollo económico de las naciones, sino que busca el equilibrio entre ambos para que los recursos que tenemos hoy, puedan estar también disponibles para las futuras generaciones.
Este concepto está muy ligado al de “huella ambiental”, que en términos generales es el impacto que dejamos los humanos en nuestro paso por la tierra.
Hay quienes entienden que más que un concepto, es un proceso, del cual somos parte cada uno de nosotros.
Cada vez son más las industrias y empresas que están adaptando sus procesos y proyectos para ser más amigables con el ambiente, que no es ni más ni menos que ser amigables con nosotros mismos y con las generaciones que vienen.
Pero también como individuos podemos convertirnos en personas sustentables, preocupados y ocupados por la huella que dejamos en nuestro mundo. Y tú, ya pensaste en tu impacto ambiental?
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